Este sábado pasado, los integrantes del Centro Juvenil tuvieron la gracia de asistir al bautismo de uno de sus compañeros.
La ceremonia fue muy emocionante pues el bautizando tiene 11 años y, para más de uno fue la primera ocasión de asistir a este sacramento. También le acompañó en este sacramento la señorita Daisy Diana que hace dos años se aproximó a la Iglesia y, tras una larga preparación, pudo recibir con gozo la gracia de Dios.
La bendición del agua.
"Yo te bautizo en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo"
La unción con el santo Crisma.
La vestidura blanca, la inocencia bautismal.
La luz del cirio Pascual, la luz de la Fe.
Todos nos sentimos renovados y revivimos las gracias de nuestro propio bautismo.
Es impresionante ver el antes y el después del Bautismo, el sacramento más necesario, que nos convierte en hijos de Dios, y uno de los que imprime carácter en el alma.
Antes. Después.
La tarde terminó con una entretenida reunión explicando la jerarquía en la Edad Media.
El teatro nos llevó a través de los siglos, para conocer al vivo la
justicia y la sacralidad
que forjaron la Cristiandad medieval.
Y así terminó un sábado más de diversión, formación y oración,
siempre al lado de Jesús Sacramentado y María Santísima.